4 enemigos que destruyen a un emprendedor
En la actualidad basta navegar unos segundos por internet para encontrarnos con artículos que hablan acerca de las bondades de ser emprendedor; muchos de ellos pintan un panorama color de rosa en el cual solamente basta con entrar para convertirte en un próspero empresario.
Sin embargo pocos de estos artículos suelen hablar de ciertos elementos o circunstancias que destruyen tus sueños de emprendimiento. Algo que podríamos mencionar como los enemigos del emprendedor.
Según el INEGI en nuestro país las probabilidades de que una empresa subsista durante el primer año son aproximadamente 65%, es decir existe una alta probabilidad del fracaso. Las probabilidades de fallar aumentan conforme pasan los años ya que de cada 10 empresas, 7 desaparecen durante los primeros 5 años. ¿A qué se debe este fenómeno? ¿Cuáles son los enemigos a vencer?
1. Problemas con los socios
Gran parte de los problemas de los emprendedores tienen que ver con los socios; cuando dentro de un proyecto no se cuenta con un esquema claro sobre la participación, reparto de ganancias y papel de los socios los conflictos comienzan a ser parte del día a día.
La empresa no son sólo números, es también ánimo y actitud de triunfo. Por ello quizá una de las decisiones más importantes del emprendedor es saber elegir a sus socios.
Cuantas historias conocemos de empresas en donde solamente uno de los socios busca posicionar y hacer crecer el proyecto empresarial.
Aunado a lo anterior si a eso añadimos que 65% de las pymes en México son industria familiar nos encontramos ante un panorama complicado en el cual el emprendedor puede verse inmerso en conflictos tanto personales como familiares, lo cual a la larga genera una batalla extra en tu camino.
2. Deudas
La mayoría de los proyectos económicos surgen en una idea; está idea en la gran mayoría de los casos necesita de capital para poder desarrollarse, lo cual a su vez genera la necesidad de buscar un financiamiento.
Y como el emprendedor no es todólogo y no tiene conocimiento acerca del funcionamiento de los préstamos bancarios suele elegir la opción que a su entender le parece la más simple, esta falta de conocimiento es la generadora de problemas económicos que carcomen poco a poco a la empresa y que al final tienen un desenlace fatal en nuestros proyectos.
En diversas ocasiones en las que me ha tocado asistir a los encuentros y foros que se organizan para los emprendedores suelo escuchar proyectos en los cuales el capital humano necesario es enorme, y cuando esto se plasma en números nos encontramos ante una nómina monstruosa que además te generará gastos ante el IMSS e INFONAVIT que terminaran por hacerte solicitar nuevamente préstamos ahorcando el flujo de dinero. Por ello dice Jeff Bezos, fundador de Amazon:
“Si en los inicios no puedes alimentar a tu equipo con 2 pizzas, es que es demasiado grande”.
Lamentablemente son muchos los emprendedores que suelen trazar proyectos demasiado ambiciosos lo cual genera prestamos igual de enormes; el resultado es fácil de predecir en unos meses el proyecto será incosteable y por lo tanto tendrá que cerrar sus puertas.
3. Falta de visión empresarial
Cuántas veces hemos escuchado a algún amigo o algún familiar decir qué tal o cual proyecto es un gran negocio; cuantas veces hemos escuchado o visto en diarios, revistas o internet artículos que nos hablan sobre las bondades de algunos proyectos, e incluso se llega a asegurar el éxito inmediato en algunas inversiones.
Dice Charlie Munger de Berkshire Hathaway: “Nunca juegues a juegos que no entiendas, incluso si ves a mucha gente ganando dinero en ellos”.
Sin duda alguna esta es la parte toral de la empresa; en muchas ocasiones queremos iniciar proyectos de los cuales no tenemos una idea de cómo funcionan, cuáles son sus fortalezas, debilidades o qué futuro pueden llegar a tener; únicamente solemos fijarnos en la imagen que proyectan los dueños o socios de algunas empresas, pensando que por el solo hecho de incursionar en su mercado seremos idénticos en imagen y semejanza.
Si piensas realizar un negocio en donde jamás has estado o únicamente tienes una idea vaga de cómo funciona, estás en un error.
Ten cuidado de aquellas sirenas que suelen contarte grandes éxitos y que despertando tu avaricia te aseguran grandes ganancias; el mundo del emprendedor es lento y quizá durante algunos años no veas un centavo de ganancia.
Realiza un proyecto en el cual tengas un conocimiento importante del mismo, no importa que esté trillado o que existan muchos de ese tipo, siempre son mayores las posibilidades de triunfar en un lugar que conoces.
4. Desconocimiento administrativo, contable y laboral
La administración de un negocio o empresa es todo; no podemos pensar en realizar un proyecto triunfador si no estamos bien asesorados; dice Ingvar Kamprad fundador de IKEA: “El veneno más peligroso para el emprendedor es el sentimiento de logro.
El antídoto es pensar qué se puede hacer para hacerlo mejor mañana”. ¿Cuantas veces nos cerramos a un consejo o una asesoría?; ¿cuantas veces caemos en la soberbia de pensar que sabemos de la A a la Z un negocio?; ¿Cuántas veces pensamos que nadie puede venir a decirnos que hacer en un proyecto que nosotros iniciamos?.
Por ello el emprendedor debe ser siempre una esponja capaz de absorber cualquier conocimiento que se le presente día a día; y para eso requiere estar asesorado.
Muchos son los casos en donde el desconocimiento sobre impuestos termina por enterrar un gran proyecto o que decir de aquellos problemas que surgen por el desconocimiento del ambiente laboral lo cual merma la productividad diezmando las posibilidades de crecer.
Como consejo podría decirte que te acerques a la secretaria de economía así como a las diversas dependencias de gobierno federal o estatal las cuales te pueden asesorar acerca de los documentos y procedimientos necesarios para que inicies tu negocio o proyecto.
Fuente: Entrepreneur