Cómo encontrar Tu Zona Productiva y saber para qué eres muy bueno
Si como emprendedor nunca te has preguntado para qué eres bueno, deberías pensártelo dos veces antes de lanzarte a crear tu propia compañía o crear un modelo de negocios.
Verás, ser productivo hoy en día es todo un reto; sobre todo porque que existen un sinfín de factores que nos distraen y que han causado que la concentración sea cada día más un desafío antes que una habilidad natural.
Encontrar tu Zona Productiva puede que no sea lo más sencillo del mundo y muchos de los grandes emprendedores que conocemos y admiramos, procuran estar todo el tiempo dentro de ella y como hemos observado sus resultados hablan por sí solos.
Entonces, ¿cómo encuentro mi Zona Productiva?
Bueno la respuesta es bastante sencilla de asimilar, pero su práctica requiere de mucho trabajo. Tal vez, si ya estás familiarizado con los siguientes términos que te voy a mencionar; será más sencillo que encuentres tu Zona Productiva.
¿Cómo Encontrar mi Zona Productiva?
Hay tres factores que definirán tu zona productiva y estos serán la base para cualquier proyecto que quieras realizar en tu vida; sin importar el giro o el enfoque que quieras darle.
1. Pasión
Aunque tal vez suene un poco trillado, el paso número uno es encontrar lo que te apasiona más que nada en el mundo.
Esa será la chispa interna que te impulsará a lograr y a trabajar todos los días por algo nuevo. Además será ese motor interno que te impulsará a seguir adelante antes cuando tengas que observar a los ojos del fracaso y preguntarte si realmente vale la pena seguir con lo que quieres hacer.
¿Cómo puedes saber qué te apasiona? Simple, puedes hacerte las siguientes preguntas:
- ¿Qué trabajo o actividad podrías hacer los próximos 5 años sin que te pagaran absolutamente nada?
- ¿Cuál es la actividad que más te llena de energía cuando la haces?
- Si el dinero ya no fuera un problema ¿A qué actividad dedicarías tu tiempo todos los días?
Esas son solo algunas preguntas que puedes hacerte para encontrar tu pasión. Ahora bien, si ya la encontraste, entonces puedes seguir con el siguiente paso.
2. Talento
Una cosa es que tengas pasión por algo y otra es que seas realmente bueno para ella.
Por ejemplo, puede que tu pasión sea la música, pero si no tienes oído musical o no te esfuerzas por desarrollarlo; difícilmente podrás tocar decentemente un instrumento o cantar en el tono apropiado.
Encontrar tu talento requiere de paciencia y trabajo, pero si me lo permites hay una herramienta llamada Strengthsfinder (Puedes buscar su versión gratuita en internet) la cual consiste en una serie de preguntas que al final te muestra cuáles son tus cinco principales fortalezas en base a las respuestas que diste. Nada mal para darte una idea para lo que realmente eres bueno.
Ahora bien, encontrar tus talentos y combinarlos con tu pasión pude traerte varias ventajas:
- Al saber para qué eres bueno, serás más sencillo que formes equipos multidisciplinarios que complementen las áreas donde no lo eres.
- También es excelente para empoderarte. No solo te enfocas en lo que te apasiona, sino que también lo haces más rápido gracias a que sabes cómo aplicar tus talentos.
- Empoderas y animas a los demás a lograr cosas extraordinarias en su vida ordinaria.
Muy bien, pues hasta este momento probablemente ya sabes qué te apasiona y para qué eres bueno. Pero lo más interesante es el tercer punto, con el cual identificarás totalmente tu zona productiva.
3. Oportunidad
Las oportunidades en la vida no son algo que llega y que sin ningún esfuerzo las identificas. Muy a menudo son solo pequeños susurros de situaciones diarias que nos suceden, las que podrían ser la oportunidad que estábamos esperando.
Entonces, ¿cómo identificar las oportunidades?
Muy simple, si eres emprendedor básicamente solo debes indagar dos conceptos:
- Problema.Identifica un problema de tu comunidad o audiencia a la que te quieras dirigir y pregúntate cómo puedes resolverlo.Al principio lo más seguro lo harás gratis, pero eso te dará confianza y posición como una persona experta en el tema; para que posteriormente quieras venderles.
- Aspiración.Asegúrate que lo que ofreces no solo sea una simple solución o respuesta efímera a una situación. Haz que tu producto o servicio también acerque a quienes lo consuman a lograr sueños y metas.Esto será un plus y gran valor agregado para que tu audiencia confíe aún más en ti.
El paso final para llegar a tu Zona Productiva.
Ahora que ya identificaste tu oportunidad, ¿cómo lo combinas con tu Pasión y Talento? Veamos un ejemplo:
Imagina a tu artista favorito, lo más seguro es que tenga una gran pasión por su música, posea un gran talento para cantar, bailar o tocar algún instrumento musical y su oportunidad está en brindarle momentos de distracción y diversión a la gente que lo sigue y escucha.
De eso se trata tu zona productiva, de enfocarte en lo que te apasiona y combinarlo con tu talento para destinarlo a lo que la gente quiere y necesita.
En resumidas palabras:
PASIÓN + TALENTO + OPORTUNIDAD = ZONA PRODUCTIVA
No olvides tenerlo siempre como base y seguramente lograrás el éxito que buscas en tu vida.
Fuente: ModoEmprendedor