Ideas para emprendedores que trabajan desde casa
Es una tendencia cada vez más habitual, pero que requiere de habilidades de gestión muy específicas.
Sin horarios.
Cuando la oficina es tu casa, cualquier momento es bueno para trabajar y, al final, estás pillada todo el día. Esta es una opinión que comparten este tipo de empresarios, a quienes les cuesta imponerse un horario. Además, el cliente sabe dónde estás y te puede llegar un pedido un viernes a las 10 de la noche. Son cosas a las que están bien habituados estos emprendedores que trabajan, con éxito, desde casa.
Presión psicológica.
A esta circunstancia, se suma la soledad que supone trabajar en el domicilio particular. La falta de contacto o relación con otros compañeros trabajo puede resultar hasta agobiante.
Ojo con el stock.
El almacenamiento de productos a veces se presenta como un arma de doble filo. Un stock grande permite abaratar los precios y aumentar las ventas, aunque a medida que crece la empresa, la falta de espacio exigirá el alquiler de un local. Otra alternativa es trabajar con cantidades más limitadas estableciendo estrategias de otro tipo, como incorporar las últimas novedades.
Requisitos legales.
Que no tengas un local no te exime de cumplir todos los requisitos legales necesarios para arrancar, siempre teniendo en cuenta la naturaleza de tu empresa. En algunos casos, incluso será necesario realizar algún tipo de reforma en tu casa para cumplir la normativa pertinente.
Contacto físico.
Cuando el cliente reclama ayuda y el contacto físico es inevitable, no le dices, venga usted a mi casa. La gente puede desconfiar de una web sin una dirección clara. ¿La solución? Si alguien quiere probar una cámara o tiene alguna incidencia, hay que quedar físicamente y solucionarlo. Además, siempre queda la opción de alquilar un local.
Fuente: Emprendedores