Si quiere escalar su negocio, debe obsesionarse con delegar
La diferencia entre alguien que piensa que es el dueño de un negocio y alguien que piensa que es un empresario, está principalmente en su forma de pensar.
El dueño de un negocio mira el trabajo por hacer y pregunta – ¿cómo puedo lograr hacer todo esto? Un empresario mira el mismo trabajo y piensa – ¿cómo puedo conseguir a alguien más para que haga todo esto?
Sé que puede parecer simplista, y ciertamente lo es, pero si usted crea un negocio y hace todo el trabajo – especialmente si hace todo el trabajo porque actualmente tiene el tiempo – está expuesto a caer en la trampa de los negocios.
Y esa es una trampa de la cual escapar para muchos parece algo imposible.
Desde el principio usted debe entender que hay muy pocas cosas en su negocio de las cuales tiene sentido hacerse cargo. Por supuesto, eso puede ser muy difícil de entender cuando apenas en un principio está tratando de ganar suficiente tracción para llamar aquello a lo que se dedica un negocio, pero es crucial.
En mi experiencia las personas que empiezan un negocio no saben cómo sacarle el máximo potencial por cuenta de sus obligaciones.
Piense acerca de lo siguiente. Digamos que usted es un consultor y ve una gran oportunidad de ayudar a las personas a hacer algo como planificación fiscal pero no sabe nada acerca de contabilidad o de los códigos de impuestos.
En ese caso estaría forzado a buscar personas que pudieran hacer el trabajo, ¿correcto?
En contraste supongamos ahora que usted es un consultor de marketing y empieza una práctica de consultoría en mercadeo. Bien, por fortuna sabe cómo escribir un buen anuncio publicitario además de conocer lo suficiente acerca de SEO y tras ver algunos videos logra aprender cómo personalizar un tema de WordPress con lo cual adivine qué – ha hecho un trabajo!
Los trabajos son muy difíciles de escalar e incluso más complejos de vender.
Si desea crecer su negocio debe volverse un obsesionado con delegar todo; no sólo unas pocas cosas. (Ah, y tenga en cuenta que delegar y renunciar no son lo mismo – hay una forma correcta y una forma incorrecta de delegar – más adelante hablaremos de esto).
Si esta idea le ha intrigado, echemos un vistazo a cómo puede implementarla.
Haga un inventario
Lo primero que debe hacer es echar un vistazo a todas las tareas que actualmente hace en su negocio. Si usted es un emprendedor solitario, es posible que esta sea un lista muy larga.
El punto de este ejercicio es empezar a entender lo que usted puede y debería delegar. Eche un vistazo a esta lista y empiece a categorizar el trabajo por importancia.
Mandi Ellefson tiene un práctico kit de herramientas escalables que ofrecen algunas formas que puede usar para hacer este ejercicio. Ella recomienda pensar sobre el trabajo en términos de las cosas que odia hacer, las cosas de las cuales debe hacerse cargo y aquellas que no puede hacer.
A partir de esta lista empiece a asignar valor. Hay valor para el negocio y costo por el hecho de que alguien más deba hacerse cargo de algunas tareas. Tampoco subestime la contribución que puede aportar alguien que sea mucho mejor en algo que usted también hace. Tengo una persona que me lleva los libros que cobra US $65 por hora. Eso puede parecer un precio alto para algunos, pero odio tanto este tipo de trabajo que me toma mucho más tiempo hacerlo que alguien que extrañamente lo ame. El resultado vs el costo es significativo.
Chris Ducker tiene una gran lista que puede ayudarle a ponerse en marcha – 101 tareas que puede subcontratar a un staff virtual (en inglés).
Hágase cargo de pocas cosas
Ahora que ha hecho su lista y ojalá un compromiso de subcontratar y delegar, es tiempo de averiguar lo que no puede delegar.
Incluso si pusiera un equipo interno muy competente, hay algunas cosas que los CEO’s/Dueños de negocios simplemente no pueden delegar (la forma como usted debe aproximarse a ellas puede cambiar, pero siempre las tendrá a su cargo, de modo que por qué no empezar a hacer simplemente eso ahora!).
- Visión – Debe tener una idea de a dónde está yendo, por qué está yendo hacia allá y la diferencia que el ir allá podrá hacer en las vidas de sus clientes, sus empleados y su comunidad. Usted nunca puede delegar esto, pero muchos ni siquiera son conscientes de la importancia que esto tiene en sus negocios.
- Cultura – Las creencias fundamentales, los estándares de operación y la historia son algo que debe continuar fortaleciendo, defender y enseñar sin importar lo mucho que crezca la plantilla de su empresa. En otras palabras, esto es predicar con el ejemplo, pero debe ser intencional.
- Relaciones con los clientes – Puede tener managers de proyectos (espero que así lo haga), pero la forma como sus clientes se sienten con respecto a su negocio, la claridad que haya con respecto a lo que ganan trabajando con usted, y el permanecer con ellos mientras crecen para que puedan apreciar lo que su negocio significa en sus vidas, es algo de gran valor para su empresa (y por tanto algo por lo que debe velar).
- Hacer que las cosas pasen – Esta es un poco difícil. Al principio usted será el encargado de esto; la persona que trae los grandes contratos, la que construye el guión de ventas y monitorea el feedback a través de todo el proceso de venta. Pero si su negocio en algún punto depende de usted para esto, quedará atrapado. Por esa razón debe construir un sistema de ventas que otros puedan operar fácilmente antes que pueda volverse totalmente libre.
- Manejo de dinero – Ya mencioné que no me gusta llevar los libros, de modo que delego cada elemento que tiene que ver con eso. Tengo un contador para la preparación de los impuestos también. Incluso trabajo con un coach que está enfocado en los indicadores de crecimiento dentro de mi negocio, pero insisto en que uno debe hacerse cargo de los indicadores clave de desempeño (KPI’s) y en manejar el dinero dentro de la empresa.
Enfóquese en aquello que tenga altas retribuciones
Una vez que sabe cuáles son las cosas de las cuales debe hacerse cargo, es tiempo de empezar a crear prioridades y manejar sus días, semanas, meses y trimestres basado en hacer más de estas actividades que le representan importantes retribuciones.
En principio esto puede incluir invertir una gran cantidad de tiempo documentando cómo se hace el trabajo y también cosas relacionadas con reclutamiento, contratación y entrenamiento interno y externo de los miembros del equipo para que puedan hacerse cargo de más y más trabajo.
Quizás entonces usted podrá liberar más tiempo para lograr vender más de lo que hace y empezar a crear procesos que le permitan entrenar a otros para lograr metas más ambiciosas.
Entonces quizás, simplemente quizás, encontrará un día o dos aquí o allá donde pueda estar lejos de los demás y aislarse para crear un nuevo producto o innovación en servicio que le permita entrar y conquistar por completo un nuevo mercado.
Y más pronto de lo que cree, se encontrará a sí mismo en su laboratorio diseñando experimentos de marketing apuntando y abordando nuevos canales y nuevas formas de generar clientes.
Así es como la escala se genera.
Por supuesto, existen doscientos setenta y tres millones de pasos en el medio, pero comienza con esta forma de pensar – cómo puede conseguir a alguien más para hacer todas las cosas que necesitan realizarse.
Fuente Bien Pensado